domingo, 23 de noviembre de 2008

6º día/ Por: Manuel Beloqui Jimenez.-


Esta mañana estabamos desayunando sobre las 9 porque a las 10 teniamos programado dar un paseo por la ciudad, también hicimos unas compras de regalo tipicos de Rusia para la familia.
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Nos hicimos muchas fotos en los sitios que ibamos visitando, fuimos a la facultad femenina donde estudian las traductoras, fuimos a tomar café...
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Esta mañana la verdad que hacia mucho frío la temperatura oscilaba entre - 15ºC y 20º aproximadamente. Luego nos llevarón a la residencia sobre las 12:30 para comer y descansar, nos echamos la siesta después de comer y nos levantamos sobre las 16:00, a esa hora fuimos a un polideportivo donde Jesús dio una clase de Taekwondo a los niños.
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El polideportivo estaba en un barrio de bandas callejeras nos dijeron, y la práctica de Taekwondo y otros deportes es un acto social para que conozcan el deporte y todo lo que conlleva con ello.
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Cuando comenzo la clase se notó que los niños eran un poco diferentes, no eran tan disciplinados como en los demás sitios donde hemos estado y jajaj eran mucho más guerreros.
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Nos hicimos fotos con ellos y luego nos fuimos a entrenar un poco para preparar el gran día que nos tocaba el día siguiente, el duelo entre los rusos y nosotros.
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En el entrenamiento estuvimos soltando un poco al aire y Jesús estuvo cogiéndonos las manoplas uno por uno, porque ya había observado a los rivales que ibamos a tener y empezó a preparar un poco la táctica de cada uno de nosotros, la verdad que nos encontramos muy bien entrenando, con fuerza y mucha motivación, al finalizar el entrenamiento nos despedimos del maestro de taekwondo de allí, que también era el organizador del campeonato de mañana.
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Después volvimos a la residencia para cenar, tardamos como media hora menos en volver que en ir por el tráfico que había por la tarde. Llegamos al CAR, cenamos y estuvimos viendo las fotos que habiamos hecho durante todo el viaje, estuvimos con un padre de un chico ruso que estuvo el año pasado en Madrid y las traductoras que siempre estaban con nosotros desde la mañana hasta que terminabamos el día.
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Terminamos de cenar y nos fuimos a las habitaciones parra preparar las cosas necesarias para hacer la dura competición que se nos aproximaba al día siguiente.
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TODOS ESTAMOS PREPARADOS
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Manuel Beloqui Jimenez